Como se debe cuidar el motor de un coche

Es vital que en cualquier vehículo el motor esté en perfectas condiciones porque de lo contrario el mismo no podría funcionar. La mejor opción que tendrás para comprar un motor de segunda es hacerlo en www.motoresdyg.com, puesto que encontrarás una gran calidad y los precios más ajustados.

Pero, es probable que no sepas cómo se cuida el motor para que este no vaya a sufrir averías y que tenga la máxima durabilidad. Por este motivo, te aconsejo seguir leyendo porque aquí encontrarás algunos consejos útiles para que puedas cuidarlo de una forma adecuada.

Consejos para cuidar tu motor

Para que puedas cuidar el motor de una forma óptima en tu vehículo, tendrás que asegurarte de seguir estos consejos básicos:

Revisa las correas

Las correas que te encuentras en tu motor son las encargadas de mover las piezas del mismo y hacerlo funcionar. En todo caso, estas correas deben estar en buen estado para evitar averías innecesarias en tu motor, y que se pueda mantener en funcionamiento.

Debes hacer una revisión periódica de las mismas, y en caso de que lleguen a presentar grietas o estén a punto de romperse, debes asegurarte de cambiarlas cuanto antes. Esto te permitirá evitar que las correas se rompan en funcionamiento y causen daños graves a tu motor.

Lubricación

Las piezas del motor requieren de una buena lubricación para evitar el desgaste prematuro de las mismas debido a un exceso de fricción. Es por este motivo que, el nivel de aceite que tenga el motor es algo fundamental a considerar porque así podrás asegurarte de que sea el óptimo.

Lo ideal es estar monitoreando el nivel de aceite por lo menos una vez cada mes para verificar que sea el indicado. También es aconsejable que hagas el cambio según las recomendaciones del fabricante entre los 5.000 a los 30.000 kilómetros dependiendo del tipo de coche y año de fabricación.

Cambia los filtros

Los filtros tanto de aceite como de gasolina son vitales para que el motor se mantenga en óptimas condiciones de funcionamiento. Esto debido a que son los encargados de atrapar todas las partículas de sedimentos presentes en estos líquidos.

Lo ideal será hacer el cambio de los filtros por lo menos una vez cada 12.000 kilómetros para mantener un funcionamiento óptimo en los mismos. Así, te asegurarás de que el motor no se llene de suciedad, y evitarás cualquier tipo de inconveniente que pueda surgir en el mismo.